Dolor

Cuanto quise mescapé.
Cuanto di tomaron.
Cuanto escapé me hallaron.
Cuanto conté fallé.

La suma siempre adolece:
el furor primero se acaba
cuando la voraz palabrita
termina de decirse "AY".
...

3 vaivenes:

Anónimo dijo...

¡ay!

sí duele ese ¡ay!

sana sana, colita de rana...si no sana hoy, sanará mañana.

abrazos, más que siderales.

Juana

Eduardo Betas dijo...

Hay un ¡ay! que cruje
se resquebraja, duele
Lo que sí. No hay que perderse. Porque después cuesta volver a encontrarse. Los ¡ay! de la vida desconciertan, desafinan, desubican. Son carteles con información falsa. Despistan.
No sé qué te estará pasando Hermano Orson. Pero sea lo que fuere, sabés que podés contar conmigo.
Abrazón

Orson Díaz dijo...

Abrazos mundoble parambos.