Que

La marcantigua quella deja y dejó
me mantiene las almitas en remojo,
las revuelca de brazos y estampidas,
las compartenteritas con los que no.

Viento de dientes apretados.
Lástima de mares y avenidas.
Exacto error, calamitosa fe.

Que no sestampen los brazos,
quel remojo de las almas continúe,
que no haya paraíso ni nube,
que la caricia de pieles
sea estandarte de alguien más.

...

3 vaivenes:

Anónimo dijo...

Este poem es uno de los más lindos.

¡qué bueno leerte!

abrazos siderales, de siderales que son.

Orson Díaz dijo...

Juana: Sideral abrazo para ti, también.

Lola dijo...

Se te lee esperanzado amigo, y coincido con juana, este cúmulo de sentimientos en verso es una belleza!