Digo tu nombre abierto para el mío, me ciño con tu nombre, penetro por tu nombre, me reposo en tu nombre, lo repito en mi vocabulario de quererte, y repetir tu nombre, modelarlo con voz de amorosa costumbre, es recoger palabras de sonrisa, es recibir palabras de colores, es aceptar palabras de flor nueva, de complacencia, y prosigo en tu nombre en donde todo es bueno y es de amor, en donde abro ventanas de buen tiempo y de noches desnudas para vivir en ti. Tu nombre es de piel tibia y pensamiento claro. Yo persisto en tu nombre. Soy tu nombre.
La mayoría de los textos que siguen son, en cierto modo, exorcismos por ardid. Su razón de ser: mantener en jaque a los poderes circundantes del mundo hostil.
1 vaivenes:
DIGO TU NOMBRE ABIERTO PARA EL MÍO
Digo tu nombre abierto para el mío,
me ciño con tu nombre, penetro por tu nombre,
me reposo en tu nombre, lo repito
en mi vocabulario de quererte,
y repetir tu nombre,
modelarlo con voz de amorosa costumbre,
es recoger palabras de sonrisa,
es recibir palabras de colores,
es aceptar palabras de flor nueva,
de complacencia,
y prosigo en tu nombre
en donde todo es bueno y es de amor,
en donde abro ventanas de buen tiempo
y de noches desnudas para vivir en ti.
Tu nombre es de piel tibia y pensamiento claro.
Yo persisto en tu nombre. Soy tu nombre.
ENRIQUE BADOSA ( España, 1927 )
Publicar un comentario